Un elogio a la memoria.
Siempre comento la cantidad de libros sobre memoria y otras facultades mentales que las librerías de mi casa albergan desde pequeño: "Desarrolla una mente prodigiosa", "Lectura rápida para todos", "Así se aprende", "Aprendizaje acelerado para el siglo XXI"... una gran cantidad de títulos, revistas y material de toda clase relacionados con estos ámbitos.
Unos títulos que comenzaron a suscitar mi atención desde la época en que terminé el colegio y empecé la universidad. Y que volvieron con fuerza en el momento en el que comencé a preparar la oposición a Ingeniero Industrial del Estado a mediados de 2021.
La verdad que muchas de las técnicas expuestas en estos libros traté de incorporarlas a mis métodos de estudio, pero, entre mi falta de paciencia ante resultados instantáneos y una carrera donde las asignaturas tenían poco de memorización pura y dura, las abandoné.
Pasaron los años y, casi a punto de terminar el período universitario, cayó entre mis manos un libro muy simpático de esos que hay en mi casa: "El libro de la memoria" de dos autores americanos: Harry Loraine y Jerry Lucas.
El índice aborda una gran cantidad de materias y técnicas en relación con la memoria: desde palabras sustitutivas a discursos, pasando por números largos, nombres y caras, memorización de naipes, entre otros muchos.
Cada uno de los capítulos se introduce con una pequeña conversación entre ambos autores. Como apunte, Jerry Lucas era gran admirador de Harry Loraine desde niño.
Una de las historietas que cuentan me parece bastante graciosa. Es la introducción del capítulo 8, "Nombres y caras". La transcribo tal cual porque merece la pena:
J. Lucas: Yo había aceptado el ayudar en sus estudios a un jugador de fútbol del Coach Woody Hayes. Fui a su encuentro y le dije: "Hola soy Jerry Lucas. ¿Cómo te llamas tú?". Él se pasó un minuto, quizá, sin decir nada; sólo pareciera que estuviese contando rápidamente con los dedos. Luego respondió: "Bob." Yo le oí, pero me picó la curiosidad. "Dispensa -dije- ¿cómo has dicho que te llamabas?" El chaval repitió la maniobra de antes, contestando finalmente: "Bob". Claro, hube de preguntarle el porqué de aquella manera de proceder.
"Pues mira -respondió-, tengo una memoria terriblemente mala; me cuesta trabajo hasta el recordar mi propio nombre. De forma que lo que hago es canturrearme, llevando el compás con los dedos: "¡Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te deseamos Bob, cumpleaños feliz!"
Para el que diga que aprender las cosas de memoria no tiene sentido.
1. Jerry Lucas.
Quería centrarme en esta publicación en la figura de uno de los dos autores de "El libro de la memoria". Nacido el 30 de marzo de 1930 en Middletown, Ohio, Jerry Lucas, según él mismo dice, no podía ocupar las primeras filas de la clase en la universidad. Sus 2,03 metros de altura podían impedir la visión de la pizarra de sus compañeros.
Jerry Lucas disfrutaba de una beca deportiva por parte de la universidad de Ohio State. Esta beca fue el resultado de una exitosa trayectoria deportiva en el High School, en el equipo de su Middletown natal.
Su paso por el baloncesto de instituto (o como decíamos antes, High School) supuso un hito histórico, convirtiéndose en un extraordinario anotador, promediando un total de 34 puntos por partido en sus años de instituto; liderando a su equipo, invicto en la temporada 1955-1956; alzándose con el campeonato estatal, en el año 56 y en el año 57 y superando el record de un tal Wilt Chamberlain de puntos totales anotados en la etapa de High School.
Ya en la universidad de Ohio State, Lucas compartió promoción con dos futuros miembros del Salón de la Fama del baloncesto estadounidense (el famoso Hall of Fame): el jugador John Havlicek y el entrenador Bob Knight, así como Mel Nowell, futuro jugador NBA.
Con todos estos alicientes, parecería que Jerry Lucas únicamente estaría dedicado al baloncesto en su paso por la universidad. Nada más lejos de la realidad: Lucas se graduó con matrícula de honor en Ohio State, pasando a pertenecer a la sociedad Phi Beta Kappa, la sociedad académica más prestigiosa de los Estados Unidos. Como bien relata la anécdota del principio, viendo su facilidad con los estudios, el entrenador de fútbol americano Woody Hayes le pidió que echase una mano con los estudios a los jugadores de fútbol americano de Ohio State.
Durante la etapa universitaria, destacamos su paso por los Juegos Olímpicos de Roma en el año 1960, tras vencer en el campeonato universitario NCAA de ese mismo año. La selección americana obtuvo la medalla de oro venciendo a Brasil en la final, anotando Lucas 21 puntos en ese partido.
La etapa del college finalizó para Lucas recibiendo el galardón "the Big Ten Medal of Honor", la cual reconoce a un solo estudiante de la promoción que se gradúa (de cada una de las universidades pertenecientes al llamado "Big Ten Member School") que haya combinado a la perfección la práctica deportiva y académica, llevando ambas a la excelencia durante su carrera universitaria. Un galardón que demuestra las facultades fuera de lo común del protagonista de nuestra historia.
No contento con eso, en 1961, la revista Sports Illustrated nombró a Lucas el hombre del año en el deporte, el primer jugador de baloncesto en recibir este premio de la historia. Sin tan siquiera ser NBA.
2. La NBA.
"I never had any special desire to be a professional basketball player".
Esta fue una declaración de Jerry Lucas una vez finalizada su carrera deportiva. Sin embargo, a pesar de no querer convertirse en jugador porfesional, Jerry Lucas ostenta una prolífica carrera como jugador de baloncesto.
Una carrera NBA que comenzó en los Cincinatti Royals entre las temporadas 1963-1969, pasando a los San Francisco Warriors (precursores de los actuales Golden State Warriors) entre 1969 y 1971 y finalmente los famosos New York Knicks entre 1971 y 1974.
Fue campeón de la NBA con los Knicks en 1973, 7 veces All Star, 3 veces miembro del mejor quinteto de la temporada, rookie del año y miembro del salón de la fama, como lo fueron sus compañeros de promoción de la universidad de Ohio State.
En conclusión, un fuera de serie.
3. La importancia de la memoria.
Durante sus inicios en la NBA, nuestro protagonista sufrió algunas lesiones severas que amenazaron seriamente su carrera. Por tanto, al final de su primera etapa en los Cincinatti Royals, el tiempo lesionado le sirvió para centrarse en ámbitos lejanos a la cancha de baloncesto. Pareciese que Jerry Lucas contemplase la opción del retiro temprano y por ello dedicase bastantes esfuerzos a estudiar oportunidades de inversión, convirtiéndose en el año 1968 en uno de los pocos jugadores de baloncesto millonarios en aquella época. Una fortuna amasada principalmente fuera de la pista de baloncesto.
Entre sus principales negocios la Wikipedia incluye la cadena de comida rápida "Jerry Lucas Beef N Shakes", una empresa de juguetes y juegos y la publicación de libros en los que recopilaba trucos de cartomagia, los cuales a veces practicaba en público.
Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. El alumno aventajado y de matrícula de honor se declaró en bancarrota en el año 1969, llevando consigo a muchos compañeros que habían invertido con él.
Tras este triste episodio, no obstante, llegaron los años en los que Lucas cosechó un gran éxito en la NBA. Sus estadísticas como reboteador siempre estuvieron en los tops históricos de la liga estadounidense. Esa facultad reboteadora no es casual. Valiéndose de sus recursos memorísticos, Lucas dividía el aro en 12 partes como las horas de un reloj. En función del lugar en el que cayese, sabía perfectamente la dirección que con más probabilidad tomaría el balón de baloncesto. Por tanto, para capturar ese balón que era desviado por el aro, contaba con unos milisegundos de ventaja que facilitaban con creces el capturar los rebotes antes que sus compañeros.
Además de esto último, Lucas aseguraba lo siguiente:
"I knew everybody's shot in the NBA" (...) "I knew where they liked to shoot from, I knew the arc of their shots, I knew who boxed out and who didn't. I just logged that into my basketball computer in my mind."
“Sabía el tiro de cada jugador en la NBA” (…) “Sabía desde donde les gustaba tirar, la parábola que seguían sus lanzamientos, sabía quien cerraba el rebote y quién no. Simplemente lo guardé en mi ordenador de baloncesto”.
Otra anécdota divertida tiene que ver con un "truco de magia" realizado por nuestro célebre protagonista quien memorizó 50 páginas de las llamadas "páginas amarillas" americanas de la isla de Manhattan. Un truco que realizó en vivo en una fiesta organizada por el escritor Dick Schaap y un compañero de equipo de Lucas, Bill Bradley, en su etapa en los New York Knicks. A esa fiesta, y como testigo ocular del truco, acudió el mismo Bobby Fischer, campeón mundial de ajedrez quien quedó atónito ante la capacidad memorística del de Middlestown.
4. Un elogio a la memoria.
Con estas anécdotas quería terminar resumiendo la importancia de la memoria como facultad humana. La memoria es un elemento clave para nosotros. Nuestra memoria almacena miles de pedazos de información y, no solo eso, sino que los estructura y ordena en función de sus características. La memoria es clave para el lenguaje, la comunicación y el propio reconocimiento de uno mismo, a partir de la historia personal y los recuerdos de cada uno. Una facultad que juega un papel clave.
Quería además en esta publicación hacerme eco de la reflexión de un profesor de literatura al que en ocasiones escucho llamado Jesús García Maestro. Actualmente ejerce como profesor de Teoría de la Literatura y Literatura comparada de la Universidad de Vigo. García Maestro recientemente hizo un comentario a una noticia de un medio de comunicación español. La noticia abordaba los resultados de España en un informe elaborado por el Observatorio Europeo de la Enseñanza de la Historia. De dicho informe (extenso y no solo centrado en ese aspecto) la noticia incluía en su titular como los "profesores españoles lideran el rechazo a aprender de memoria fechas y hechos históricos". Un titular que seguro está cargado de recursos literarios que garanticen el clic y sobre el que no me quiero detener, pues creo que es sumamente generalista y no alcanza a entrever el contexto global del informe elaborado por el Observatorio.
Por tanto, lejos de entrar en cuestiones partidistas o ideológicas, quería únicamente enfatizar el elogio que Jesús García Maestro hace de la memoria. De su importancia en el estudio de las diferentes materias, en como constantemente estamos haciendo uso de ella, en como la comunicación también requiere de un esfuerzo memorístico cuando recurrimos al lenguaje...
La historia de Jerry Lucas puede servirnos también de inspiración y ejemplo. Sobre todo en cuanto a la aplicación natural que el atleta realizaba de su mente a lo largo de su vida personal, académica y profesional, y los éxitos cosechados en muchos de esos ámbitos como consecuencia de ese entrenamiento mental.
Un entrenamiento mental que está al alcance de todos (sin tener que memorizarse las páginas amarillas) y que puede hacernos la vida más fácil en pequeños detalles.
Y sobre todo, un entrenamiento mental clave para los estudiantes de cualquier edad y disciplina. Los recursos mnemotécnicos a nuestro alcance son extensísimos. Por tanto, tenerle miedo a los datos, las fechas, los nombres de fármacos extraños ya no es una excusa.
En mi caso personal, aquellas veces que he tenido que memorizar muchas cantidades de datos sin método alguno, la experiencia es un poco frustrante. Supone tener que hacer pasar los datos por un embudo por el que no caben. Es por eso que las asociaciones inverosímiles, el alfabeto fonético o sistema mayor y otras muchas técnicas me hicieron la vida muy fácil en aspectos que a otros les podía costar algo más de tiempo.
Si no sabes bien de qué te hablo, algunas técnicas mnemotécnicas las expongo en Los reyes godos y las alineaciones de Primera División.
Para terminar, algunas conclusiones que veo para mí:
La importancia de la memoria.
La memorización de datos/hechos/situaciones/nombres puede traer grandes beneficios personales y profesionales.
Importante memorizar adecuadamente, siguiendo criterios mnemotécnicos aplicables a mi método de estudio.
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Para el que quiera referencias:
"El libro de la memoria" (Lucas, J. and Lorayne, H.)
El vídeo de Jesús García Maestro:
La referencia al informe: "General Report on the State of History Teaching in Europe" del que se hace eco la noticia mencionada: General Report