El pasado 28 de enero finalizó la edición del año 2024 del Abierto de Australia. Para los que desconozcan un poco el mundillo del tenis, el Abierto de Australia es el llamado primer major del año. El primer torneo de Grand Slam de la temporada al que seguirán Roland Garros, Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos.
El fan más casual del tenis probablemente conozca estas competiciones. Además de acaparar la atención de muchos medios de comunicación, en los últimos tiempos, figuras como la de Rafael Nadal y sus 14 victorias en Roland Garros han llevado a conocer este deporte en cualquier rincón de España.
1. ¿Qué es un Grand Slam? 🎾
¿Qué diferencia al torneo de Grand Slam con respecto a otros torneos a lo largo de la temporada?
En primer lugar, se podría aludir al prestigio. Un prestigio construido a través de ediciones y ediciones de los torneos más históricos de la temporada. Imagino que cualquier tenista inscrito en el torneo tienen bien apuntada la fecha en el calendario.
También supone la confluencia del circuito de hombres, de mujeres, de dobles masculino y femenino, de dobles mixto, juniors y otras muchas categorías, en único evento, generando verdaderas sinergias entre las diferentes competiciones.
El prestigio también trae consigo un premio más jugoso en lo económico para cualquier tenista, incluso perdiendo en primera ronda. Asimismo, también se reparten más puntos a lo largo del torneo influyendo mucho en los rankings tanto ATP (masculino) como WTA (femenino).
En cuanto al formato, a diferencia de otros torneos, el mínimo de partidos para alzarse con la corona es de 7 (siendo en otros torneos durante el año de 5 o 6) en un lapso de dos semanas. Destaco también el cuadro masculino y los partidos al mejor de cinco sets, convirtiendo estos en verdaderas maratones. Daniil Medvedev, finalista de esta edición de 2024 acumuló la friolera de 24 horas y 17 minutos en pista a lo largo de los 7 partidos. Más de un día entero jugando bajo el calor, el sol y la humedad del verano australiano.
Mi principal conclusión es lo difícil de conseguir la victoria final en este deporte y en estos torneos para cualquier tenista en cualquier modalidad. De todas las personas que juegan al tenis en el mundo conocer personalmente a alguien que haya ganado un Grand Slam es una rareza estadística.
2. La historia del torneo. 🏆
Más allá de las victorias de Jannik Sinner en la modalidad masculina, de Aryna Sabalenka en la femenina, de la primera derrota de Djokovic en el torneo desde el año 2018, de la derrota de nuestro Carlos Alcaraz en cuartos de final, quería destacar la victoria de un hombre Indio de 43 años en la final de dobles del Abierto de Australia: Rohan Bopanna.
Rohan Bopanna se ha convertido en el campeón de Slam y número uno más longevo de la era Open a sus 43 años. Se dice pronto.
43 años y 1,91 metros de estatura que le permiten sacar a 200 kilómetros por hora con la misma facilidad con la que yo mojo las magdalenas en el café.
A lograr esa proeza también ha contribuido el australiano Matthew Ebden, pareja de dobles del indio, quien ha jugado un papel fundamental en la dupla. De las declaraciones a pie de pista tras ganar la final, ambos se dedican bonitas palabras:
*"Esto no podría haber sido posible sin un fantástico compañero australiano a mi lado. Gracias a Matt... tuvimos una temporada fantástica el año pasado. Para mí, ganar mi primer Grand Slam de dobles masculino aquí en el Grand Slam de Asia Pacífico es totalmente un Grand Slam en casa” Rohan Bopanna.
“Gracias a mi compañero Rohan. Tiene 43 años. Este es su primer título de dobles de Grand Slam masculino. La edad realmente ni siquiera es un número para él. Es joven de corazón. Él es un campeón. Él es un guerrero. Ha luchado duro a mi lado durante todo el año pasado. Te estaré eternamente agradecido, a tu increíble equipo y a tu familia” Matthew Ebden.
Pero claro, como ocurre muchas veces en la vida, el triunfo esconde muchos sacrificios y esfuerzos imperceptibles para el ojo del aficionado o el lector de prensa.
3. Una rosa con muchas espinas. 🌹
El tenis profesional (como casi cualquier deporte) trae consigo un nivel de exigencia muy alto, físico y mental, así como un despliegue de medios económicos muy alto: viajes, inscripciones en torneos, material (raquetas, cordajes, zapatillas), sesiones de fisioterapia y recuperación, preparación física y mental...
Por hacer una aproximación burda y con poco fundamento, pero para ilustrar la dificultad del tenista profesional (esto también sería replicable para otros deportes): se calcula que aproximadamente 46 millones de hombres juegan al tenis en el mundo. El ranking ATP está compuesto por, aproximadamente 1800 jugadores. Haciendo una división tonta, ¡esos 1800 jugadores se encuentran en el percentil del 0,004%! Yo esto me lo recuerdo por si alguna vez pienso que podría ganar algún juego a algún profesional.
El camino de cualquiera de estos deportistas es por tanto, cuanto menos, exigente.
En el caso de Rohan Bopanna, investigando un poquito, el inicio de su carrera profesional data del año 2003, aunque sus apariciones por diversos torneos se dieron desde el mismo año 2000, tras una carrera en categoría Junior en la que su ranking más alto fue el 601 del mundo en 1997.
Un inicio de carrera profesional que se fraguaría en el llamado circuito Challenger. Este circuito constituye una "segunda categoría" dentro del tenis profesional después de los torneos de nivel ATP. En una "tercera categoría" (grosso modo) se encontrarían los torneos del circuito ITF World Tennis Tour. En estos dos circuitos comenzaría a competir Rohan Boppana, haciendo presencia también en Copa Davis y en los Juegos Asiáticos con su selección nacional.
¡Ojo! Que en un torneo ITF el nivel ya es altísimo. De verdad que no soy consciente del nivel de exigencia para triunfar en estos torneos.
Las lesiones no fueron evitadas por el protagonista de nuestra historia, el cual estuvo parado hasta 9 meses entre 2004 y 2005 debido a una lesión de hombro que pudo amenazar su carrera.
¿Qué record de victorias / derrotas tiene Rohan Bopanna? Bien, Bopanna ostenta un balance en singles de 15 victorias y 33 derrotas. Sin embargo, es en doubles donde sus virtudes más brillan, presentando a día de hoy un balance de 504 victorias y 367 derrotas. Es en este último formato en el que ha construido su carrera (evidente por los números, ¿no?).
Su debut en Grand Slam se produjo en el año 2006, tanto en individual como en dobles. En 2008 obtiene su primer título ATP en el llamado "Countrywide Classic" en Los Angeles, haciendo pareja con Eric Butorac. Y es en 2010 el año en el que alcanza la final del Abierto de Estados Unidos (el último Grand Slam de la temporada) enfrentándose a los famosos hermanos Bryan (números 1 del mundo en dobles en aquel momento) y cayendo derrotado ante estos, con su pareja Aisam-ul-Haq Qureshi, tenista pakistaní.
7 años después, y tras alcanzar el top ten mundial en varias ocasiones y conquistar varios títulos en ese lapso de tiempo, Rohan Bopanna se alzó con su primer título de Grand Slam en la modalidad mixta en Roland Garros, haciendo pareja con la canadiense Gabriela Dabrowski. Pareja a la que se enfrentaría el año siguiente (2018) en el Abierto de Australia, perdiendo la final junto a la húngara Timea Babos.
En mi humilde opinión, Rohan Bopanna tenía una carrera plagada de éxitos hasta este momento, con muy grandes momentos. Todos estos éxitos contando con que el tenista no tenía cartílago en sus rodillas. Esta lesión le ha hecho tener que lidiar con el dolor durante los años. Sin embargo, él mismo destaca que, a pesar del horror de la pandemia del Covid-19 en el año 2020, ese tiempo le permitió una recuperación más larga de lo habitual y una mejor puesta a punto (No Cartilage, No Problem). Un año (2020) en el que Rohan Bopanna cumplió 40 años.
La vuelta al circuito no fue fácil. En el año 2021 concatenó un total de 7 derrotas consecutivas hasta el mes de abril. Su pensamiento entonces era: "¿Qué estoy haciendo?". Sin cartílago, casi 20 años de carrera profesional y esa sensación que debe de llegar a cualquier deportista de querer parar.
Sin embargo, no fue ahí donde se quedó Rohan.
Desde entonces, el tenista indio comenzó a mostrar uno de los mejores rendimientos de su carrera, volviendo al top 20 al año siguiente (2022). Ese mismo año alcanzó la semifinal de Roland Garros haciendo pareja junto a Jamie Murray (el hermano del mismísimo Andy Murray).
En 2023 se conformó la dupla con Matthew Ebden. El éxito ese año fue mayúsculo, alzándose con el título en el Masters 1000 de Indian Wells, la final del Mutua Madrid Open, semifinales en Wimbledon, final en el abierto de Estados Unidos (siendo el finalista más longevo de la era open) y volviendo al top ten en el mes de julio.
Todos estos logros nos llevan al recién acabado mes de enero, en el que Rohan Bopanna y Matthew Ebden se alzaron con el título en el Abierto de Australia 2024. Torneo en el que también se convirtió Rohan en número 1 del mundo con 43 años.
4. Algunas reflexiones. 💡
"I'm at level 43, not age 43" ("No es que tenga 43 años, sino que estoy al nivel 43")
Esta fue una de las declaraciones de Rohan Bopanna tras ganar el Open de Australia. Quizás sea una de esas ocasiones en las que el dicho "La edad no es más que un número" encaje mejor.
Personalmente, considero esta hazaña como algo muy inspirador. Y no solo eso, sino como un hito que quizás veamos repetido en poco tiempo. ¿Por qué digo esto? Pues porque en el top 50 de dobles de la ATP únicamente hay 9 jugadores actualmente por debajo de los 30 años. Y no solo eso, sino 7 jugadores con 40 o más y 15 jugadores entre los 35 y los 40 años. Muy interesante a mi parecer.
¿A qué puede deberse esto? Pues la verdad que no sabría decir exactamente, y algún experto seguro que podría corregirme, pero creo que el tenis es un deporte bien conocido por su faceta mental/psicológica exigente y en el que la experiencia es un grado valiosísimo para cualquier jugador. Exponerse a muchas situaciones distintas siempre nos ayuda a lidiar con esos escenarios más estresantes en cualquier disciplina. El veterano en general siempre las va a gestionar mejor.
Además de la experiencia del veterano, el dobles quizás sea ligeramente menos exigente a nivel físico (aún siendo también durísimo a nivel élite).
Además de estos aspectos, me gustaría destacar también la perseverancia de Rohan Bopanna. El trabajar con constancia persiguiendo siempre nuevos objetivos. El esforzarse, no solo con el ímpetu de los veinte, sino en cualquier época de nuestra vida.
Porque el indio no es un cualquiera que ha salido de repente como campeón de Grand Slam, sino que de hecho ya lo era en dobles mixto y tenía en su haber una carrera que más de uno desearía haber conseguido. Y lo que parecería el retiro o el ocaso de muchos jugadores, se convierte en el momento más dulce de otro. Qué charlatán es el universo a veces, ¿verdad?
Yo hace poco aprobé una oposición. Es verdad que nadie me ahorró ni un sufrimiento. Sin embargo, hacía poco que había salido de la universidad y puede decirse que había abandonado el estudiar hacía relativamente poco y podía tener algo más de facilidad en sentarme delante del escritorio. Pero junto conmigo también aprobaron muchos compañeros que habían terminado sus estudios mucho tiempo antes. Cuando escuché la historia de Rohan Bopanna en cierto sentido me acordé de esos compañeros. La edad no es más que un número y nunca es demasiado tarde para liarse la manta a la cabeza y perseguir nuevos objetivos. Quien sabe, igual en ese nuevo camino cae nuestro Grand Slam particular.
Para mía esta historia se resumiría en tres “moralejas”:
Convertir las derrotas en lecciones y experiencias para el futuro.
La edad no es ni siquiera un número sino un nivel.
La importancia de tener objetivos que cumplir aunque nunca lleguemos a cumplirlos.
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